Leo la Biblia y encuentro:
«Que la única deuda con los demás sea la del amor mutuo: el que ama al prójimo ya cumplió toda la Ley. Porque los mandamientos: no cometerás adulterio, no matarás, no robarás, no codiciarás, y cualquier otro, se resumen en éste: Amarás a tu prójimo como a ti mismo». (Romanos 13:8-9).
Leo el Corán y dice:
«¡Humanos! Ciertamente os creamos iguales a partir de hombres y mujeres e hicimos grandes multitudes y numerosas naciones para que os conozcáis y colaboréis entre vosotros». (Sura l-Hujurat, 49:13).
Leo la Torá y dice:
«Convertirán sus espadas en rejas de arado, y sus lanzas en hoces; no alzará nación contra nación su espada, ni se adiestrarán más para la guerra» (Yishayahu, 2:4). «Aléjate del mal y haz el bien, pide la paz y persíguela» (Tehilím, 34:15).
Leo la Declaración Universal de los Derechos Humanos y dice:
«Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros». (Artículo 1)
Y después de leer pienso: No somos tan distintos, aunque nos empeñemos tercamente, día tras día, en parecerlo. Y también creo que la grandeza de algunos libros consiste en que cada uno encuentra en ellos lo que quiere encontrar. Quien siente odio, solo hallará más rencor.
Feliz noche de paz a todas las personas de buena voluntad, crean en lo que crean y piensen como piensen. Que todas las noches de vuestra vida, sean noches de paz. Salam, Shalom, Paz y Salud!
Sed felices! ;)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Echa tu carta al buzón